martes, 13 de noviembre de 2012

Tu arro…yo

Hoy quiero ser tu arroyo
y deslizarme, sinuoso,
entre tus pechos deliciosos,
volcánicos lugares de magma petalino.

Quiero estancarme
en los meandros de tu pubis,
montículo y parnaso de mi eros,
y beberme el rocío de tu esencia.

Quiero llegar hasta tu clímax
ese perlado momento jadeado
que en tu boca me sabe a cielo.

Quiero comer de tu sonrisa,
cabalgar todos tus susurros
y decirte amante vaciándome en tu boca.

Hoy quiero que llegue ese momento
y que no pase, que se quede para siempre
para no tener que recordarlo
para ser tu arroyo de semen blanquecino.

1 comentario:

  1. Siempre perdurará
    el recuerdo del encuentro
    que la lujuria incitó
    entre velas y ribera.

    Lenguas apasionadas
    que abrazan y rozan,
    manos ansiosas
    que exploran y tocan

    Y cuerpos que danzan
    al son de la música
    reflejados en espejos,
    entre sábanas mojadas.



    ResponderEliminar